El acceso a las playas públicas de Cancún continúa siendo bajo estrictos protocolos de seguridad sanitaria, por lo que previo al arranque de la temporada vacacional de Semana santa, el gobierno de Benito Juárez se prepara para reforzar las medidas y mantener balnearios seguros para turistas y locales.
En entrevista, la presidente municipal Mara Lezama reiteró que la pandemia sigue y si bien es cierto, se puede realizar diferentes actividades como la apertura de playas, con los aforos permitidos por el Semáforo Epidemiológico Estatal que esté vigente cada semana, se deben extremar las medidas para frenar la propagación de COVID-19.
“Queremos que disfruten las playas, pero sobre todo preponderamos su salud y su vida. Les pedimos que sean muy cuidadosos con todos los protocolos en materia de salud, porque queremos cuidarte, que no te contagies y no contagies”, enfatizó la Primer Edil.
El titular de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat), Vagner Elbiorn Vega, anunció que habrá un reforzamiento en los filtros sanitarios, para alcanzar la reactivación económica gradual, ordenada y responsable.
“En coordinación con la Secretaría de Marina (SEMAR), la Guardia Nacional, Policía Turística, Protección Civil y Bomberos, se implementarán los operativos de supervisión para el cumplimiento de las reglas sanitarias y de seguridad de estas playas”, destacó.
Actualmente, al estar el Semáforo Epidemiológico Estatal en color amarrillo, se mantiene un horario en los balnearios de lunes a domingo de 9:00 a 17:00 horas, con un máximo de cinco personas por grupo.
Para el acceso, continúa la toma de temperatura corporal, uso de gel antibacterial y obligatoria de cubrebocas, al igual que se exhorta respetar la sana distancia.
También se cuenta con contenedores color naranja para depositar residuos de COVID-19 como los cubrebocas, acciones que se complementan con jornadas permanentes de limpieza en todas las playas.
Elbiorn Vega dijo que adicional a estas medidas, se están colocando contenedores de colillas de cigarros al ser este el contaminante número uno en el mundo, ya que, según los investigadores, uno de estos desechos al tener contacto con el agua, pueden contaminar más de 50 litros de líquido.