Científicos que investigan el ADN fuera de nuestros genes, el llamado “genoma oscuro”, han descubierto regiones de reciente evolución que codifican proteínas asociadas a la esquizofrenia y el trastorno bipolar que podrían servir para diagnosticar y tratar la esquizofrenia y el trastorno bipolar.
Aunque la heredabilidad de la esquizofrenia y el trastorno bipolar responde a una tendencia de aproximadamente el 70%, colocándolos entre los trastornos de salud mental más heredables, existen variabilidad llamativa en estudios anteriores realizados, por ejemplo, en gemelos, donde esa tendencia puede oscilar del 60 al 85 %.
La esquizofrenia y el trastorno bipolar son trastornos mentales debilitantes que son difíciles de diagnosticar y tratar. Se han encontrado muy pocas pistas sobre su causa en las secciones de nuestro ADN conocidas como genes. Los científicos piensan que algunos puntos en el “genoma oscuro” asociados con estos trastornos pueden haber evolucionado porque tienen funciones beneficiosas en el desarrollo humano, pero su alteración por factores ambientales conduce a la susceptibilidad o al desarrollo de esquizofrenia o trastorno bipolar.
Los investigadores indican que estas nuevas proteínas pueden usarse como indicadores biológicos para distinguir entre las dos condiciones e identificar a los pacientes más propensos a la psicosis o al suicidio. Sus resultados se publican en la revista Molecular Psychiatry.
“Al escanear todo el genoma, hemos encontrado regiones no clasificadas como genes en el sentido tradicional, que crean proteínas que parecen estar asociadas con la esquizofrenia y el trastorno bipolar -declaró Sudhakaran Prabakaran, miembro del Departamento de Genética de la Universidad de Cambridge y el autor principal del informe-. Esto abre un enorme potencial para nuevos objetivos. Es realmente emocionante porque nadie antes había mirado más allá de los genes en busca de pistas para comprender y tratar estas afecciones”.
Fuente: Agencia Sapiens