En los últimos años, los fraudes cibernéticos han adquirido nuevas modalidades en México y el mundo. Una de las más recientes consiste en llamadas telefónicas realizadas desde el extranjero con la supuesta promesa de un empleo atractivo. Este esquema, detectado por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), representa una amenaza para miles de ciudadanos, ya que combina técnicas de ingeniería social con herramientas tecnológicas que buscan obtener información personal o recursos económicos de manera ilícita.
La alerta emitida por la SSPC responde a un incremento en la detección de este tipo de intentos de fraude, en los cuales se emplean principalmente ladas internacionales de Estados Unidos (+1) y Reino Unido (+44). Estas referencias generan confianza en la víctima al asociarse con países donde se perciben mayores oportunidades laborales, lo que facilita la manipulación psicológica.
Modus operandi de los ciberdelincuentes
De acuerdo con la Unidad de Inteligencia, Investigación Cibernética y Operaciones Tecnológicas de la SSPC, los delincuentes logran acceder a bases de datos filtradas que contienen números telefónicos y, en algunos casos, información personal sensible. Con esta información, realizan llamadas desde plataformas digitales que permiten enmascarar el número de origen, dificultando la identificación de los responsables.
Durante la llamada, los supuestos reclutadores ofrecen empleos atractivos con condiciones fuera de lo común: salarios competitivos, beneficios inmediatos o contratos internacionales. Una vez que logran captar la atención de la persona, buscan obtener datos adicionales, tales como números de identificación oficial, información bancaria o direcciones personales. En otras ocasiones, solicitan pagos por supuestos trámites administrativos o migratorios que en realidad no existen.
Un aspecto particularmente peligroso es el uso de enlaces o archivos adjuntos enviados por mensajería instantánea o correo electrónico tras la llamada. Estos pueden contener software malicioso que permite a los ciberdelincuentes acceder a los dispositivos de la víctima, comprometiendo contraseñas, cuentas financieras o incluso la cámara y el micrófono del equipo.
Recomendaciones de la SSPC
Para prevenir que más ciudadanos sean víctimas de este tipo de fraudes, la SSPC difundió una serie de medidas de seguridad:
- Ignorar mensajes o llamadas de números desconocidos y evitar devolver llamadas a números sospechosos.
- Desconfiar de ofertas laborales internacionales no solicitadas, sobre todo cuando llegan por llamadas telefónicas inesperadas.
- Nunca proporcionar datos personales sensibles ni realizar pagos sin verificar previamente la autenticidad de la empresa o la oferta.
- Confirmar la existencia de la vacante mediante canales oficiales, como páginas web corporativas o directorios de recursos humanos.
- No abrir enlaces ni descargar archivos enviados por remitentes desconocidos, ya que pueden contener programas dañinos.
- Mantener los dispositivos electrónicos actualizados y utilizar herramientas de ciberseguridad confiables.
Estas medidas, subrayó la dependencia federal, resultan esenciales en un contexto en el que la digitalización de los procesos de reclutamiento laboral facilita tanto las oportunidades legítimas como los intentos de fraude.
Acciones a seguir en caso de ser víctima
La SSPC también brindó lineamientos claros en caso de que un ciudadano haya sido víctima de este tipo de engaños. En primer lugar, es fundamental suspender todo contacto con el número o remitente sospechoso. Posteriormente, se recomienda reunir y conservar evidencias, tales como capturas de pantalla, mensajes de texto y registros de llamadas, que puedan servir en una investigación oficial.
Las víctimas deben contactar a la policía cibernética de su entidad federativa para recibir la asesoría correspondiente y presentar la denuncia formal. Si se realizaron transferencias o pagos, resulta indispensable notificar de inmediato a la institución financiera con el fin de intentar bloquear los movimientos o, en su caso, recuperar los recursos.
Además, se recomienda revisar y asegurar los dispositivos comprometidos, cambiando contraseñas, eliminando aplicaciones desconocidas y actualizando el software de seguridad. Con estas medidas, es posible reducir el riesgo de que los ciberdelincuentes sigan teniendo acceso a la información del usuario.
Impacto ciudadano y marco legal
Este tipo de fraudes representa una amenaza directa no solo al patrimonio económico de las personas, sino también a la seguridad de sus datos personales. De acuerdo con la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares, las empresas y particulares deben resguardar la información de manera segura; sin embargo, la filtración de bases de datos constituye un desafío permanente que los ciberdelincuentes aprovechan.
En este contexto, el Gobierno de México, a través de la SSPC y la Guardia Nacional, ha reforzado campañas de prevención y concientización en materia de ciberseguridad. Dichas acciones se enmarcan en las políticas de seguridad nacional que reconocen el ciberespacio como un ámbito prioritario de protección, al igual que el territorio físico.
Ejemplos internacionales
Este fenómeno no es exclusivo de México. Países como Colombia, Chile y España han reportado esquemas similares de fraude telefónico internacional. En muchos casos, las víctimas son persuadidas para entregar información confidencial con la promesa de oportunidades de empleo o inversiones extranjeras. Los organismos de seguridad en esas naciones han reforzado los mecanismos de cooperación internacional para rastrear a los responsables y compartir mejores prácticas en materia de prevención.
Perspectiva futura
La digitalización del mundo laboral seguirá creciendo, lo que implica mayores retos en materia de seguridad cibernética. La SSPC insistió en la importancia de fortalecer la educación digital de la ciudadanía para que pueda identificar señales de fraude y proteger su información.
El reto para las instituciones será mantener actualizadas las herramientas de rastreo y denuncia, así como consolidar la cooperación internacional para combatir a grupos de ciberdelincuentes que operan en distintas jurisdicciones.
Mientras tanto, la recomendación principal a la ciudadanía es la prevención y la desconfianza ante ofertas laborales demasiado atractivas o que llegan por canales poco convencionales. Con el fortalecimiento de la cultura de la denuncia y la asesoría especializada, será posible reducir el impacto de estas prácticas delictivas.