Contexto de la controversia
La congresista republicana Marjorie Taylor Greene volvió a ser centro de atención en el Congreso de Estados Unidos tras solicitar que se apruebe su proyecto de ley para declarar el inglés como idioma oficial y único del país, en medio de una creciente polémica por declaraciones del cantante Bad Bunny, quien invitó a los estadounidenses a “aprender español” antes de su presentación en el medio tiempo del Super Bowl 2025.
La iniciativa, registrada en marzo de este año, fue reactivada públicamente luego de que el artista puertorriqueño hiciera un comentario en tono humorístico durante su participación en el programa Saturday Night Live, en el que dijo en inglés:
“Si no entendieron lo que dije, tienen cuatro meses para aprender español.”
El comentario, que buscaba resaltar la presencia latina en la cultura estadounidense, desató una ola de reacciones políticas y mediáticas. Entre ellas, la respuesta directa de Greene, una de las figuras más ultraconservadoras del Partido Republicano y cercana al expresidente Donald Trump, quien aprovechó el momento para insistir en su propuesta legislativa.
La propuesta de ley: inglés como idioma oficial
El proyecto impulsado por la congresista de Georgia busca establecer que el inglés sea el idioma oficial del Gobierno Federal de Estados Unidos. Aunque no prohíbe el uso o la enseñanza de otras lenguas, sí establece que cualquier documento, trámite o comunicación gubernamental se realice exclusivamente en inglés.
Además, el texto propone reforzar los requisitos lingüísticos para el proceso de naturalización, exigiendo que las personas aspirantes a la ciudadanía demuestren su capacidad para leer y comprender la Constitución estadounidense en inglés.
Según Greene, su iniciativa busca “preservar la identidad nacional” y “unificar al país bajo una lengua común”, aunque críticos y analistas advierten que la medida podría tener un impacto discriminatorio hacia las comunidades latinas, asiáticas y de inmigrantes recientes que componen una parte significativa de la población estadounidense.
Bad Bunny y el peso simbólico del español
El comentario de Bad Bunny surgió en un contexto en el que la presencia del español en Estados Unidos ha crecido de manera exponencial. De acuerdo con el Censo 2020, más de 41 millones de personas hablan español como lengua materna en el país, lo que convierte a Estados Unidos en la segunda nación del mundo con más hispanohablantes, solo detrás de México.
El artista puertorriqueño, que se ha consolidado como uno de los mayores exponentes globales del género urbano, aprovechó su intervención televisiva para resaltar ese poder cultural. Su elección como figura principal del espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LVIX, programado para el 8 de febrero de 2025 en Santa Clara, California, representa un hecho histórico: será el primer latino en presentarse en solitario en dicho escenario.
Su frase, aunque con tono irónico, fue interpretada por sectores conservadores como una provocación política. Sin embargo, para amplios sectores de la comunidad latina y artística, fue una reivindicación del idioma español y del papel de los latinos en la cultura estadounidense contemporánea.
Reacciones políticas y sociales
La respuesta de Greene no tardó en viralizarse. Desde su cuenta oficial en la red social X (antes Twitter), escribió:
“Bad Bunny dice que Estados Unidos tiene cuatro meses para aprender español antes de su perversa y no deseada actuación en el medio tiempo del Super Bowl. Es un buen momento para aprobar mi proyecto de ley para que el inglés sea el único idioma oficial”.
La publicación fue acompañada de críticas hacia la NFL, a la que acusó de promover “actuaciones sexuales demoníacas” durante los espectáculos de medio tiempo, un discurso que ya ha utilizado en ocasiones anteriores para atacar a figuras del entretenimiento vinculadas a la comunidad LGBT+ o al arte latino.
El mensaje fue respaldado por algunos sectores del movimiento MAGA (Make America Great Again), que han convertido el tema lingüístico en parte de su agenda identitaria. Para sus simpatizantes, declarar el inglés como idioma oficial simboliza “la defensa de los valores nacionales”.
Sin embargo, diversas organizaciones civiles y académicas advirtieron que esta postura ignora la diversidad cultural y lingüística que caracteriza a Estados Unidos.
Un debate que trasciende la música
El caso de Bad Bunny reaviva un viejo debate en la política estadounidense. Desde hace décadas, varios legisladores han impulsado proyectos similares sin éxito. Actualmente, aunque el inglés es el idioma predominante, no existe un idioma oficial a nivel federal, algo que sorprende a muchos fuera del país.
A nivel estatal, 31 de los 50 estados han declarado oficialmente el inglés como su idioma, mientras que algunos, como Hawái y Nuevo México, reconocen además lenguas indígenas o el español como cooficiales.
Para expertos en sociolingüística, la propuesta de Greene tiene un carácter más simbólico y político que práctico. “En la vida cotidiana, la realidad multilingüe de Estados Unidos es irreversible. Desde la economía hasta la cultura popular, el español forma parte integral del país”, señaló la profesora Laura Torres, especialista en política lingüística de la Universidad de California.
Identidad, inclusión y política cultural
La polémica también pone de relieve el peso creciente de la población latina, que ya representa más del 19% de los habitantes del país. En estados como California, Texas o Florida, el bilingüismo se ha convertido en una ventaja competitiva y un símbolo de identidad local.
Bad Bunny, nacido en Puerto Rico —territorio estadounidense donde el español es idioma oficial junto con el inglés—, ha defendido abiertamente su identidad latina y su lengua materna. En varias entrevistas, ha afirmado que cantar en español es una forma de resistencia cultural y de orgullo.
Mientras tanto, la propuesta de Greene enfrenta un futuro incierto en el Congreso, dominado actualmente por debates presupuestarios y por la carrera presidencial de 2026. Pese a ello, su iniciativa refleja una tendencia política que busca redefinir los límites de la identidad estadounidense, en un país cada vez más diverso y multicultural.
El Super Bowl 2025: un evento histórico
El Super Bowl LVIX, que se celebrará el próximo 8 de febrero en el estadio Levi’s de Santa Clara, California, será observado no solo como un espectáculo deportivo, sino también como un acontecimiento cultural con fuerte carga simbólica.
La actuación de Bad Bunny —artista ganador de múltiples premios Grammy y Billboard— será vista por más de 100 millones de espectadores en todo el mundo, convirtiéndose en una plataforma sin precedentes para la representación latina en la cultura estadounidense.
Independientemente del debate político, su presencia en el escenario más visto de la televisión norteamericana marcará un momento histórico de inclusión y diversidad, que difícilmente podrá ser ignorado por la clase política.
Conclusión
La controversia entre Marjorie Taylor Greene y Bad Bunny trasciende la anécdota del Super Bowl: representa el choque entre dos visiones opuestas del país. Una que busca preservar una idea monolingüe de la identidad nacional, y otra que celebra la pluralidad cultural y lingüística que define al Estados Unidos del siglo XXI.
Mientras el Congreso debate, millones de personas en todo el continente se preparan para escuchar al artista puertorriqueño cantar en español frente al mundo entero —quizá recordando su frase que lo inició todo:
“Tienen cuatro meses para aprender español.”